Trail Running: Sierra Escartín

TRAIL RUNNING: 

SIERRA ESCARTÍN,
EL RETORNO.

Hace tanto que no hacía nada por el monte que no recuerdo cuando fue mi última entrada…… Cinco meses. ¡Vaya!

Sin lamentos. Es lo que hay.

Voy a Broto en el Puente de Mayo y tirón en la espalda nada más subir la maleta al coche. Empiezo bien. Pinchazo en el Centro de salud y tranquilidad hasta el domingo que es cuando no puedo más y me calzo las zapatillas para correr un rato…., aunque sólo sea salir un ratín, ¡por Dios!.

Me calzo las zapas nuevas. Hay que mancharlas de una vez que se me van a echar a perder...

Sin pretensiones ni programa, y por tanto, sin comida, con poca agua pero con muchas ganas salgo a correr sin objetivo claro pero en dirección al Gábaro. Desde Broto se llego al camping de Oto y luego a la pista del barranco de Yosa. Allí cruzo el río y sigo por una senda durante 200 metros, hasta tomar la pista que me llevará hasta una balsa a los pies del Manchoya. 

Pues ese era el plan. Sin más.

La pista es aburrida. Muy aburrida. Pero no tiene mucha pendiente, quitando un par de largas rampas, lo que me permite trotar cómodo, parar a mirar el paisaje, beber, hacer fotos…

Desde el principio se vislumbra el Gábaro (1958 mts), primer hito al este de la Sierra Escartín, que desde esta primera parte de la pista tapa el Manchoya,más alto, que queda detrás.

A medida que tomo altura, la pista me ofrece una vistas fabulosas que, arriba se convierten en "brutales"… ¿quien no reconoce esa silueta del fondo?

O todo ese macizo…., de punta a punta. Enterito.

En poco más de una hora y cuarto llego hasta la balsa. No me duele el cuello y me noto bien.

-No estoy cansado… -cómo lo voy a estar, me he pegado dos días sin moverme!… Oye, pues me acerco al Gábaro. 

Pues para allá voy. Continuo por la pista que han abierto las máquinas y al llegar al final me meto ya campo a través, en recto, hacia arriba buscando el  el Gábaro.

Subo ligero. Muy ligero. Caramba….

-¿Que no me iré al Manchoya directamente?… Pues voy.

A mitad de subida giro a mi derecha y voy a buscar el collado entre el Gábaro y el Manchoya. 

De vez en cuando, hay que mirar atrás.

En el collado me recibe una vaca más seca que la mojama y me hace pensar que no llevo comida ni casi agua en el camel. Con poco, acabo como ella… jejeje.

En un par de minutos corono el Manchoya (2033 mts).

Ahora que hago.  ¿Bajo o sigo?…Joder. 

Yo voy bien y ahora es todo "llano". Así que llamo por teléfono y digo que no me esperen para almorzar que voy a dar la vuelta completa y a bajar por el Pelopín.

Me relajo un poco viendo los alrededores y el macizo de Monte Perdido.

Y me pongo a correr en un continuo sube y baja que me hace pasar por Punta Cotoral (1988 mts) y Monchoa (1962 mts).

Por el camino voy viendo los pueblos abandonados de esta zona, que son muchos. Yosa, Escartín, Otal...

Una mirada atrás me muestra lo que he recorrido…, un trozo majo.

Voy entre trazos de senda y pista. Unas veces por prado y otras por roca.

Justo antes de tomar las últimas rampas hacia el Pelopín, encontramos el desvío del GR que, de tomarlo, nos ole adía hacia la pista que más tarde me bajará a Broto.

Y por fin, el Pelopín (2006 mts). Con mucha gente. Y yo seco y con un hambre que apunto estuve de quitarle un bocadillo de jamón a una niña a darme a la fuga. 

Dos horas y media. ¡Vaya!.

Un último trago y sigo por la creta hacia abajo, en recto, siguiendo unos hitos en dirección a la pista que se adivina más adelante.

Más abajo, enlazo de nuevo con el GR 15. La senda que flanquea el Pelopín se ve claramente.

Ahora sólo resta dejarse caer por la pista hasta Oto. Eso, si te dejan pasar las cabras.

Al cabo de media hora llego a las antenas de Oto. Ya estoy. Ya veo Broto y Oto.

Para ir de Oto a Broto podemos hacerlo por la carretera o por una senda que conecta los dos pueblos y que arranca del abrevadero. Son 5 minutos y llegamos a Broto por el puente del Sorrosal.

Al final, la tontería me sale por un poco más 3:30 horas. Han sido 24 Km y casi 1.400 mts de desnivel acumulado, que, para no querer salir…., ya ha estado bien.

A ver si con un poco de suerte encuentro un hueco y tiro para arriba… ¡Mecachis!.