lunes, 11 de octubre de 2010

ASCENSION A PUNTA DE LAS OLAS

PUNTA DE LAS OLAS (3.002 mts)

Tiempo ascensión: 3 horas y media.
Tiempo descenso: 2 horas y media.
Desnivel: 800 mts.

Esta es la crónica de lo que quiso ser y no pudo.

Este sábado 10 de octubre, aprovechando una ventana de buen tiempo que nos ofrecía el temporal que se ha adueñado de la Península Ibérica en este puente del Pilar, decidí intentar el Soum de Ramond (3.254 mts) por la ruta de Punta de las Olas (3.002 mts) y subir al Baudrimont SE (3.026 mts).


El Soum de Ramnod (3.254 mts)
Hace algunos años subí el Soum desde el cuello de Monte Perdido flanqueando primero el Baudrimont NW y luego el Baudrimont SE, alcanzando la plana o depresión que conecta con Punta de las Olas. Después, he intentado llegar al Soum otras dos veces por Punta de las Olas y siempre me he quedado en la cima de este último. Esta es, para mí, una vía inédita, muy a mi pesar.

El sábado, como he dicho, daba buen tiempo en http://www.mountain-forecast.com/ y en http://lameteoqueviene.blogspot.com/, pero a las 7 de la mañana, algo no marchaba como debía; chispeaba ligeramente y había un denso banco de niebla desde Cuello Arenas. Ninguna de las dos páginas consultadas hacía mención a esta situación..... Malas sensaciones desde el primer momento.

Iniciamos la marcha  a las 8:00 desde donde nos dejó el autobús de Nerín y alcanzamos Cuello Gordo en media hora. El tiempo parecía mejorar. Las tres Sorores se despejaban y la niebla iba desapareciendo.

Desde Cuello Gordo, una densa niebla.

Las tres Sorores se despejan.

Monte Perdido.
La senda que tomamos es la discurre por el camino que lleva al refugio de Góriz. En un mometo dado aparecen tres mojones seguidos, que nos desvían hacia la derecha en dirección al Collado de Arrablo, ganando altura hasta los pies de la Torre de Góriz.

Camino al Collado de Arrablo.
Desvío hacia el collado de Arrablo.
Este es una senda que discurre por una pendiente suave que conecta con la traza del GR-11 justo antes de dicho collado. Una vez hemos ganado el collado, el GR se bifurca y nosotros debemos tomar el que va hacia la izquierda que nos llevará por las faldas del Soum hasta Punta de las Olas.

Hasta aquí hemos tardado una hora y cuarto y el tiempo ha mejorado muchísimo. Cielo azul, cumbres despejadas.... y niebla que parece que no termina de entrar desde el cañón de Añisclo. Un buen momento para tomar un bocado.

Monte Perdio, Punta de las Escaleras
y Torre de Góriz con el cielo azul.

Punta de las Olas y niebla
que en el cañón de Añisclo.
A partir de este punto toda la senda discurre por el trazado del GR con lo que no hay pérdida posible. El camino está marcado con hitos, manchas rojas y blancas de pintura y tan sólo nos queda disfrutar del camino. Tres resaltes sin importancia hasta alcanzar el farallón rocoso de Punta de las Olas y encontrar la chimenea que lo sube.

Camino a Punta de las Olas por el GR

En el camino, y todavía sin niebla, tiempo para fotografiarnos en alguna cascada o para observar ejemplares de tritón del Pirineo. A estas alturas de la marcha, el cielo estaba otra vez cubierto y las temperaturas habían bajado bastante. Las predicciones hablaban de 4º C, pero la sensación es que hacía más frío.


Cascada que baja del glaciar del Soum.

Tritón del Pirineo.
A partir de la parada técnica de la cascada y antes de acometer el primer resalte de la senda, entró la niebla de manera inesperada. Y aquello no parecía que tuviese intención de cambiar. Algo fallaba en la predicción; niebla, frío y leve chispeo...... No obstante, optamos por continuar camino por si volvía a despejar. No se dió el caso.

El camino discurrió con niebla densa que aclaraba de tanto en tanto. En esa situación el problema estaba en localizar el punto en el que debíamos abandonar el GR para encarar la chimena que nos daba acceso a la pedriza previa a la cumbre de Punta de las Olas. 

Niebla...

...y más niebla.
Y por una de aquellas casualidades del destino, por unos momentos se abrió un pequeño claro que nos permitió ver la chimenea. Llevábamos caminando 2 horas y 45 minutos. Y para allá que fuimos como alma que persigue el diablo.


La chimenea en el momento en el que aclaró.

Detalle de la chimenea.

La chimenea es la única dificultad técnica de la ascensión a Punta de las Olas. Una chimenea de I que en algún sitio he visto que calificaban de II. Sinceramente, sin ninguna dificultad. Nos pusimos los cascos por aquello de evitar problemas y la encaramos sin perder un minuto porque el tiempo empeoraba por momentos.


Parte final de la chimena. 

Una mirada hacia atrás.

Último resalte.

 Puedo jurar que el de la foto "no es Calimero".

La pedriza que sigue a la chimenea es una de las más aburridas que he hecho en mi vida. Una larga diagonal que va a buscar el collado de una de las "olas" por un sinfín de sendas, alguna de ellas marcada por esporádicos hitos. El peligro de esta zona es que, en condiciones de niebla como las que teníamos, cuando inicias el descenso hay que encontrar la senda buena que te conduzca a la entrada de la chimenea correcta -ahí es nada-. 

Pedriza y niebla.

Solución: Cada diez metros me pongo a montar un hito. Todo por no subir con el GPS, bendita tecnología. El palo es minino, pero es la única manera de solucionar la vuelta con probabilidades de éxito si hay que bajar rápido -que mira por donde, es como tuvimos que bajar-.

Y en estas nos plantamos en el collado con un viento que empezaba a ser considerable. Desde allí, las marcas te llevan hasta una segunda chimenea. Si continuamos por la senda, sin coger la chimena, vamos hasta un vivac bajo la cima. Nosotros subimos por la chimenea, algo más corta que la primera y de la misma dificultad técnica. Se ponen las manos un par de veces.

Chimenea antes de la cima.

Y por fin la cima. Tres horas y media, construcción de hitos incluidos. Niebla cerrada, frío considerable, viento fuerte...... y lluvia.... ¡comenzó a llover!, lo que nos faltaba. Eso era el temporal que se había adelantado y no había más que hablar....


Una muestra del tiempo en la cima.
Casi ni se veía.

Foto cimera... rápida, rápida
en un momento que se abrió un poco.

En la cima no estuvimos más de 5 minutos. La opción de ir en dirección al Soum de Ramond quedó descartada de inmediato. Con esa niebla, sin GPS y lloviendo, era una acción kamikaze. Me volvía a quedar con las ganas de coronar por esta vía.

Nos pusimos la ropa de abrigo -toda-, los impermeables y para abajo sin perder tiempo que arreciaba. La cámara a la mochila. Ya no había tiempo para fotos.

El camino de vuelta lo encontramos con facilidad -benditos hitos- y encontramos la entrada de la chimena a la primera. En la misma chimenea paramos, al abrigo de unas rocas, a tomar un trozo de pan y rápido para abajo.

Ahora el problema estaba en que el autobús nos recogía a las 7 de la tarde, por lo que para guarecernos de la lluvía y el frío hasta esa hora había que desviarse hasta Góriz. Y eso hicimos. Sin parar, cima-Góriz: 2 horas.

Y lo que tenía que suceder, sucedió. Minutos antes de llegar Góriz despejó el tiempo, las cimas quedaron limpias y yo rumié mi mala suerte. En el tablón del refugio vimos un boletín de la última hora del viernes por la noche en el que decía que se adelantaba el mal tiempo al sábado por la mañana. Vamos, que nos comimos el temporal con papas fritas.

Bocadillo, cerveza y café con leche. No había que lamentarse, sinó sentirse contento por haber coronado un tresmil y haber bajado bien.

A las 5 de la tarde iniciamos el camino de vuelta a Cuello Gordo para tomar el autobús. Para entonces ya se volvía a cubrir y la niebla entraba por todos los flancos.






El valle de Ordesa, a nuestros pies, comenzaba a marcar un otoño que nosotros habíamos sentido en nuestros huesos.



martes, 5 de octubre de 2010

FERIA DE BROTO

FERIA DE BROTO

El 25 de septiembre se celebró la feria de Broto.

Ahí van algunas fotos de la feria.

Hubo cabras.
Hubo vacas de Broto -Parda de Montaña-.
Hubo vacas de raza....... de otra raza.
Hubo caballos.
Hubo ovejas.
Y hubo toros.
Y estuve yo.
Y estuvo Mª José.
Y estuvo el Mondarruego de fondo, siempre presente.
Hubo chistorra y longaniza.
Hubo concurso de pacharán casero.
Hubo concurso de tortilla con jurado de lujo.
Siempre con la presencia de las fuerzas vivas de Broto.

Y Victor, el agente forestal de Ordesa

Y hubo aperitivo final en el Bar Vallés o casa Pía.
Con Anka y Cristina en la barra....
También estaba Pía que no quiso salir

 Vamos, que fue un día fantástico..... excepto para alguno que se quedó "colgado".

La Guardia Civil -¡Vivaspaña!- 
tuvo que intervenir en la ferrata del Sorrosal.