jueves, 23 de enero de 2014

TUROLENSES POR EL MUNDO: LAPONIA IV

CUARTO DÍA:

TRINEOS DE HUSKIES,
PESCA EN EL LAGO 
Y SAUNA


Esta vez con perros y haciendo de musher…, esto ya es otra cosa.

El cuarto día amanece como siempre, nublado. Ya se va notando el frío y nieva. Es lo que le pega a este lugar, frío y nieve…, aunque un ratón de sol se agradecería. Esto soleado debe ser espectacular.



La actividad de hoy es pescar en un lago…, helado. Así que hasta allá que nos llevan. Nos ofrecen un chocolate caliente en la kota para coger temperatura y nos piden que no nos alejemos mucho de la zona indicada. Hay más de 50 cm de hielo, pero por si las moscas.



Sabemos que estamos en un lago porque nos lo dicen, porque no hay árboles…. y por otras pistas un tanto curiosas.



Cada uno tiene que hacer su agujero o elegir uno ya hecho. Los de mi pueblo, somos muy chulos y optamos por hacernos el agujero.






Era inevitable hacerte la foto con el "aborigen"…..


El cielo parecía que quería abrirse y pudimos ver algo de color detrás de los abetos y los abedules.



Pescar, pescar... no pescamos, pero pasamos un rato agradable que acabó comiendo un hamburguesa de reno.



Nerviosos toda la mañana esperando ir en trineos, cuando nos dijeron que íbamos a salir, echamos a correr. Los aullidos de los perros, nerviosos también por salir, creaban un ambiente espectacular.






Unos animales preciosos nos esperaban... Los guías nos dieron unas sencillas claves para el manejo del trineo… y a montarnos.




La vuelta fue impresionante. Pasamos por lugares preciosos; bosques, lagos, pequeños montes con bonitas vistas…. No hubo mucho tiempo para fotos…, no pensábamos en ello. Había que mirar hacia todos los lados y verlo en directo.






Fueron quizás, un par de horas de auténtico lujo.

Algo cansados y muy contentos, volvimos a nuestra cabaña. Había que probar la sauna y salir desnudo a la calle a frotarse el cuerpo con nieve.

En honor a la verdad hay que decir que no es tan duro como parece. Te metes en una sauna a 70º y estás que te mueres medio cocido como una gamba y lo único que quieres es algo fresco. Fuera, en la calle, a -15º/20º…., es el paraíso. Te embadurnas de nieve y se va evaporando a marchas forzadas….., y no te enteras del frío.

Aitana, como no podía ser de otra manera, muerta de risa.




A cenar y a dormir. Otro buen día en Laponia.














miércoles, 15 de enero de 2014

TUROLENSES POR EL MUNDO: LAPONIA III

LAPONIA
TERCER DÍA:

TRINEO CON RENOS
ESQUI DE FONDO



Ya te digo. Renos a todas horas. 

Tercer día y salida en trineo de renos a primera hora, ósea, a las 10. Lo primer que te dicen es que un reno no es un alce…, pues claro…, pero no todo el mundo lo tenía claro. El reno va en manadas, se domestica y es como el cerdo en España del que se aprovecha todo, y el alce es salvaje, no hace manadas y puede pesar media tonelada. por tanto, paseo de renos, no de alces.

Nos dividen de dos en dos en trineos tirados por un reno. Aitana y yo en un trineo y Mª José sola en otro. No hace mucho frío. Estaremos a casi -10ºC y comienza a nevar, fuerte en algunos momentos y a pesar de eso no nos dan nada para cubrirnos…., para esta gente todavía hace calor.




Los animales esperan pacientes comiendo nieve…, tienen calor ¿pero eso no era malo?. Aitana dice que les dolerá la barriga.



A nosotros nos toca un reno blanco con una cuerna que está mal de la cabeza. Cuando arranca, pega unos botes descomunales, se tira al suelo en mitad del tiro…, en fin. Aitana desternillada todo el viaje.




Arranca el trineo y te deja llevar por el paisaje. Yo pensaba que esto sería como cualquier zona bonita del Pirineo o de los Alpes…, pero es distinto. No hay montaña, la altura máxima en el país es de algo más de 1.000 mts, los bosques de abetos y abedules son interminables, los lagos…, en todo el país hay más de 180.000.








Una parada técnica para que los guiris nos hagamos una foto con un reno.



Pasamos por lagos helados y contemplamos un paisaje inmenso en tonos blancos y negros. No se si han sido una, dos o tres horas, pero ha sido una delicia.

El trayecto acaba en una granja de renos. Allí visitamos a un grupo de hembras embarazadas y les damos de comer… y para hacer tiempo hasta la comida, cogemos unas raquetas y nos adentramos en el bosque…. hasta que Aitana decide jugar.







La comida la hacemos en una kota. Una especie de tienda india pero de madera con un hogar en el centro. Nosotros nos asamos unas salchichas fuera, nos secamos un poco y entramos….., a comer hamburguesa de reno y beber chocolate caliente.




Volvemos a la cabaña a descansar un rato y por la tarde nos acercamos a las pistas de esquí. Tocaba esquí de fondo.

Yo nunca lo había probado y me pareció muy divertido. Tanto, que estoy deseando subir a las pistas de Nerín a volver a probar.




Una advertencia que nos hacen... ¡Recordad que en Finlandia, para hacer esquí de fondo se circula al revés!...


Cansados pero contentos por un día interesante nos llevan a cenar a una kota-buffet en donde el reno y el alce son la estrella. Probamos la lengua de reno que es un manjar y que, ciertamente estaba muy rica. Aitana empezaba a echar de menos los huevos fritos del tío Carlos.


lunes, 13 de enero de 2014

TUROLENSES POR EL MUNDO: LAPONIA II

LAPONIA 
SEGUNDO DÍA:

PAPA NOEL 
MOTOS DE NIEVE



Levantarse a las 8, mirar por la ventana y verlo todo negro no es una novedad. Que te pase a las 10, ya es otra cosa.

Ducha y traje térmico que fuera hacía frío. Desayuno buffer a la finlandesa que no tuve la picardía de fotografiar, pero que era un poema, y primeras impresiones de Laponia…., hay poca nieve y no hace frío…., ¡qué desastre!. 

Bueno…, hoy vamos a ver Papá Noel y eso no nos lo quita nadie.

Damos una vuelta por los alrededores hasta que nos venga a buscar el autobús y tomamos contacto con la zona… Estamos en medio de ninguna parte, eso está claro, pero es que ni con las señales y los mapas somos capaces de saber dónde está ese "ninguna parte"…, ¡es fantástico!.



A nuestras espaldas, una estación de esquí…, vacía y con luces. Increíble.  


Una gasolinera para motos de nieve…, foto con ella. La gente nos mira… ¡llegan los guiris de España!


El autobús nos lleva hasta un "centro de ocio" que, como iremos descubriendo,  será el punto de arranque de todas nuestras actividades. Allí nos dejan jugando con sillas de nieve, palos de hockey hielo y…., raquetas de nieve. Aitana me mira, mira las raquetas y pone cara de ¿casi 4.000 Km para ver raquetas?… ¡vámonos con las sillas!



….¡Un reno!… todos los guiris vamos a ver el reno como idiotas…, ¡nos hartaremos de renos…, hasta en la sopa y no es una metáfora!




Por fin, nos montan en un trineo…, tirado por renos, y nos adentran en el bosque para ir a la casa de Papá Noel. El paisaje es espectacular incluso sin nieve y lo de ir en trineo, mola mucho. Aitana está como un flan con tanta novedad.


Al final del viaje se ve una cabaña muy sencilla. Sí, es la cabaña de Papá Noel. En la puerta un "Elfo"…, o "Elfa"…, no sabemos bien, se esfuerza en poner velas para iluminar el camino hasta la puerta.




Tocamos a la puerta y sí……, ahí está. Un Papá Noel de casi dos metros, con un libro rojo en la mano que apunta la visita de Aitana.

-¿Eres Aitana?…., pasa.

Ultimas palabras de Papá Noel en castellano. A partír de ahí inglés, finlandés, o sueco. A elegir.

Y lo que aconteció fue magia. De verdad. O crees en Papá Noel…., o mejor no vayas. Lloré como una nenaza...







……. magia total…., la etiqueta de Catai Tours sobraba…, pero fue magia.

Aitana en shock y nosotros igual. Eso merecía una buena comida para reponernos.

Lástima que la comida fuera ensaladilla de patata y salmón o ensaladilla de  salmón y patata. Aitana optó por pan con mantequilla, zumo de bayas y macedonia de fruta. Los mayores nos comimos hasta el moho de los rincones…, ¡por dios que comida!


Vuelta a la cabaña ya con noche cerrada y actividad con motos de nieve para niños….. ¡sólo para niños!.

Después unos comienzos titubeantes, Aitana se puso las pilas y repitió, repitió y repitió…, a todo lo que daba la moto.









Y nosotros, aguantando…, pero encantados.

Fin de fiesta en el hotel cercano, tomando una cerveza.


Para los que beban demasiado, una parada de taxi en la puerta. Aquí ese tema está muy, muy chungo. Si te paran bebido…., cárcel. Si te pillan con una cerveza en la calle…, multa.


Nosotros volvimos caminando a la cabaña, viendo como comenzaba a nevar y como se notaba cada vez más el frío del invierno lapón.

Un buen primer día…, que nos preparaba para uno segundo, incluso mejor.